mardi 13 octobre 2009

Les orages, Free, La Poste et moi…

Era medianoche pasada cuando entré al edificio huyendo a cuatro gotas de lluvia y un viento glacial inesperado. Las dos líneas teléfonicas funcionaban. Llamé a Sylvie y no estaba en casa. Había prometido llamar a Juan regresando del Luxembourg y la línea Free no respondía. Como en un filme de horror, las ventanas se abrieron de golpe haciendo danzar las cortinas que buscaban protección al interior del salón, el alumbrado público comenzó a parpadear y cayeron las segundas gotas. Miles de gentes arpenteaban las calles disfrutando de la « nuit blanche » parisina. Se impuso un silencio espantoso en mi calle. Un relámpago iluminó el salón en penumbras y el cansancio de un sábado cargado me hizo ir a la cama. Cuando amaneció ya estaba en pie para postear mi impresión sobre la instalación a la que dediqué la noche del sábado. Free no funcionaba, y toda la telefonía estaba muerta. Al restablecerse la línea normal llamé a la asistencia técnica y me prometieron un nuevo adaptador en 48 horas, es decir, debería recibirlo el miércoles temprano. Nada de nada. Pensé que era ineficacia de Free, pero no !, era a causa del deporte favorito de los sindicatos franceses : hacer huelga. Y no estoy contra, no, las huelgas son insoportables y todo, pero ayudan a avanzar en materia de derechos laborales. Justamente el sábado en la mañana firmé contra la posible privatización del servicio público de La Poste. La huelguita de marras era nada más y nada menos que de los empleados del servicio de distribución en el 17ème. No me quedó más remedio que esperar el restablecimiento y esperar el nuevo adaptador. Llegó ayer finalmente, pero no era el adaptador. Era la mismísima freebox que estaba dañada. De nuevo contactar la asistencia técnica de Free, bastante eficaces y gentiles pero a un costo de comunicación que todo el mundo encuentra desproporcionado. Como convenido, pasó hoy a las 09h30 un técnico de la sociedad y para regocijo mio, ya puedo otra vez navegar, comunicar y postear después de más de una semana incierta. Gracias Andrés, Susana, Juan, Magtiel, Sylvie, y otros amigos que me han contactado a causa del inopinado silencio de cAc. Estamos a 13, miren qué casualidad, mi número de suerte de cualquier manera que lo ponga. Lo dedicaré a trabajar, pues todavía andamos por los portales del Villaclara !

5 commentaires:

  1. Pues me alegra que estes "en linea" otras vez. Pues ya me andaba preocupando.
    Por aca la lluvia y oscuridad tambien nos acompañan :(
    Mejor nos vamos a Santa Clara :-)
    Un saludo!

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  2. ¡Enhorabuena Carlos! Pasada la tempestad esperemos no llegue el mal tiempo, sólo el arco iris. Amigo, ya no soportaba más a la "Profe" de guardia, así que agradezco con más fuerza las soluciones tecnológicas que nos permite nos lleves a imágenes de mayor cordialidad. Todos los días paso por aquí y me encanta tener las puertas abiertas. Un abrazo.

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  3. No puedes quejarte, Magtiel, acabo de enviarte los portales del Villaclara para que no se mojen, eviten esos lloviznasos que "estoeselcolmo" en materia de catarros y gripes publicitarias! Me alegra que ya sepas que estoy "vivito y coleando", aunque si no me instalaban rapido la consola de internet me mudaba para Santa Clara, te fijas que esto es el colmo, también! Saludos, cAc

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  4. !Enhorabuena Andrés! Por supuesto, no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista! Lo de la "profe" de guardia fue un problema de coordinacion, quiso hacer tan bueno su trabajo que no tuvo quien la reemplazara en la puerta durante diez dias! Hoy se hizo tarde para llamarte, dime cuando estaras dispuesto a escuchar alegrias y lamentaciones! Un fuerte abrazo para los dos, cAc

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  5. También me sentía como si la “vigilante profe” me estuviera impidiendo seguir dándole la vuelta al parque. Gracias por el regreso, me he encontrado mucho que leer.
    Saludos,
    Michael

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